Con la instalación de la comisión de expertos que revisará las exenciones tributarias en el país se encendió el debate sobre impuestos en el país.
El Gobierno ya se encuentra analizando de dónde sacarán los 20 billones de pesos de hueco fiscal que quedará por cuenta de la pandemia y que quedaron plasmados en el Marco Fiscal de Mediano Plazo.
Uno de los principales objetivos del Ministerio de Hacienda de cara a la reforma tributaria pospandemia será redistribuir la carga fiscal. Esto, en plata blanca, quiere decir bajarles los impuestos a las personas jurídicas y aumentarles a las personas naturales, además de quitar ‘gabelas‘ improductivas.
En medio de este debate, el director de la Dian, José Andrés Romero, puso sobre la mesa una idea que, desde ya, generó polémica en la población.
La idea del funcionario es incrementar la tributación para los ciudadanos con mayores capacidades distributivas, incluyendo, por ejemplo, a quienes no tienen dependientes.
“Hay personas naturales que pueden ganar lo mismo, pero una persona natural puede tener hijos, dependientes, muchos gastos y hacer inversión social, y la otra no; por tanto, la otra tendrá mayor capacidad contributiva”, agregó.
En este mismo sentido, el ministro de Hacienda, Alberto Carrasquilla, agregó que posiblemente el proyecto de reforma tributaria “bajará la vara” a la hora de pagar impuestos.
Aunque desde el Ministerio de Hacienda han dejado claro que no se lanzarán a una discusión sobre la política tributaria en medio de la pandemia, ya empiezan a rondar ideas al respecto.
El ministro Carrasquilla dejó claro que las conclusiones de la Comisión Tributaria serán el principal insumo de la próxima reforma fiscal.
“El sistema tributario puede mejorarse en términos de progresividad, simplicidad y eficiencia. Los resultados de la Comisión serán un insumo fundamental para adecuar la estrategia fiscal de mediano plazo de la nación, para mejorar notablemente el recaudo”, indicó.
Según cifras de la Dian, el año pasado los beneficios y ‘gabelas‘ sumaron más de 90 billones de pesos, es decir, casi 8 puntos del PIB y, en promedio, 12 reformas tributarias.
Fuente: semana.com